En los países mediterráneos como España, Italia o Grecia, hay menos casos de depresión severa que en otros territorios europeos por lo que se estudió la relación que podría existir entre tristeza profunda y dieta... y los resultados que se publicaron en la revista Archives of General Psychiatry es que las legumbres, el aceite de oliva, el pescado, los cereales, las verduras y hortalizas, y la fruta ejercen un papel de prevención frente a la depresión y pueden reducir el riesgo de aparición de la tristeza profunda entre 40 y un 50 por ciento.
Se sabe que el aceite de oliva, el principal activo de la dieta mediterránea y sobre el que aún se investiga y se descubren efectos beneficios, influye en la estructura de las membranas de las células nerviosas y mejora el funcionamiento de la serotonina, el neurotransmisor cerebral responsable del optimismo. Pero el efecto preventivo de la dieta mediterránea sobre el estado de ánimo no solo se limita al aceite de oliva, los ácidos grasos del pescado azul también tienen un papel muy importante pues trabajan en el buen funcionamiento del sistema nervioso central.
Por otro lado, el ácido fólico también tiene un papel muy importante en el trabajo del sistema nervioso central. Son fuente importante de folatos las verduras verdes, los cereales integrales, los cítricos, los frutos secos, las legumbres y la levadura de cerveza.
Además los altos niveles de antioxidantes de las frutas y verduras protegen al cerebro y contribuyen a reducir el riesgo de depresión.
Pero tan importante como la dieta es el modo en que ingerimos los alimentos. La digestión empieza en la boca y masticar bien los alimentos es fundamental en la asimilación de los nutrientes además de que evitaremos la aparición de molestias como la hinchazón, la acidez o el estreñimiento... que pueden afectar a nuestro buen humor.
Recuperemos nuestra dieta. Si cada vez aparecen más evidencias científicas sobre los efectos positivos y saludables de mantener una alimentación basada en los principios de la tradición mediterránea... lo cierto es que es en los propios países del arco mediterráneo donde nos saltamos con más frecuencia los hábitos de alimentación saludable que han hecho célebres nuestras costumbres gastronómicas.
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